SEGUNDO INGREDIENTE: Teatro-Imagen para trabajar los estereotipos de género.

Cuando el cuerpo y el grupo ya están disponibles (ver paso 1) podemos empezar a practicar con Teatro- Imagen, una técnica de la metodología del Teatro del Oprimido(2) que permite trabajar con material abstracto de manera sencilla, como si el cuerpo fuese una escultura para representar diferentes conceptos. Es una herramienta de creación artística y nos da también una perspectiva de la realidad. Es aplicable en cualquier edad y en cualquier idioma.

Cuando empezamos a trabajar con este tipo de herramientas, es necesario definir cuál es el espacio escénico en el aula y cuál el espacio del público.

Una buena manera de poner en práctica el poder del Teatro-Imagen y empezar a ver cómo funciona puede ser a través de “el encuentro”: dos participantes van caminando (en el espacio escénico) hasta encontrarse y se produce un stop. Se congelan y el público (el resto del alumnado) puede ir aportando una narración a partir de la imagen dada. Después, el resto de participantes se pueden añadir a la imagen para enriquecerla en contenido y forma. Se puede jugar también a la “rueda de teatro imagen”, que consiste en que una persona sale al centro del círculo y propone una imagen, a esta imagen se añade otra persona completándola y dándole un determinado sentido. El resto de participantes tienen la opción de entrar en la escena tocando en el hombro de la persona que quiere sustituir, creando así otras microhistorias. Es interesante si vamos rellenando los volúmenes vacíos que deja la persona sustituida con respecto a la persona que continúa en escena.

Para aplicar el Teatro-Imagen a la prevención de las violencias machistas, vamos a empezar por reflexionar sobre los estereotipos de género.

 

Hacemos “caminadas” explorando el espacio (ver paso 1) y hacemos estatuas que representan conceptos desde los más simples (árbol, silla, instituto, gato…) a los más complejos y acordes a lo que queremos investigar (madre, padre, hombre, mujer, fuerza, fragilidad…). La idea es representar con el cuerpo espontáneamente los conceptos para reflexionar cómo tenemos (in) corporados los estereotipos de género. De esta manera, tomamos consciencia de cómo el género atraviesa nuestros cuerpos y nos lleva a unas determinadas acciones en la cotidianidad.

Nos disponemos en círculo y analizamos las estatuas de “hombre”, “mujer”, etc…y podemos invitar a la reflexión con las siguientes preguntas:

  • ¿Cómo hemos representado a la mujer? ¿y al hombre? ¿por qué? ¿todos los hombres son fuertes? ¿todas las mujeres son débiles?
  • ¿De dónde nos viene esto?
  • ¿Qué te regalaron de pequeño/a? ¿qué le estoy diciendo a un niño que se le regala un coche o un balón? ¿qué le estoy diciendo a una niña si le regalo un muñeco o una cocinita?
  • ¿Qué colores predominan en nuestra vestimenta? ¿hay diferencia? ¿y en nuestro material escolar?
  • ¿Cómo estamos sentados chicos y chicas?
  • ¿Qué es un estereotipo, entonces?
  • ¿Qué ocurre si me salgo del “molde”, del estereotipo?

Hacemos el experimento del abrazo para ver cómo funciona la presión grupal si me salgo del molde/ estereotipo: dos chicos se dan un abrazo en el centro del círculo. Dos chicas se dan un abrazo en el centro del círculo. Invitamos a reflexionar sobre lo que ha ocurrido: ¿Qué diferencias encontramos entre un abrazo y otro? ¿Qué ocurre con la presión grupal? ¿Qué relación tiene esto con las “caminadas” cuando invitamos a “salirnos del molde”?

Otro camino para practicar con Teatro- Imagen y combinarlo con lo anterior sería jugar con los “tres básicos de Teatro- Imagen”: nos ponemos por parejas y puedo hacer que mi pareja transite por diferentes estatuas de estas 3 formas:

  • Esculturas: el cuerpo de mi pareja es como si fuera de barro y lo “moldeo” como si fuera una escultora, mediante contacto físico.
  • Títeres: imagino que mi pareja tiene hilos en las articulaciones y puedo mover esos hilos creando así determinados movimientos e imágenes.
  • Espejos: creo imágenes a partir de que mi pareja imite mis movimientos.

Podemos jugar con los 3 básicos de Teatro-Imagen enfocándonos en un concepto, por ejemplo, en los estereotipos que le atribuimos al hombre y en los que le atribuimos a la mujer y ver qué pasa cuando los ponemos “en cuerpo”.

En estos juegos es fundamental poner la atención en el cuidado del cuerpo de mi compañera o mi compañero.

Otra dinámica que resulta interesante es “la fotografía”: el grupo se divide en 2 subgrupos. El subgrupo “A” realiza una fotografía evocando algún concepto de los trabajados, el subgrupo “B” tiene 10 segundos para observar esta composición antes de que se deshaga y después la debe reproducir. El subgrupo “A” entrará posteriormente a “moldear” las figuras del subgrupo “B” para que ambas fotografías tengan el mayor parecido posible. De esta manera, representamos una fotografía de diferentes conceptos complejos, mientras que el otro grupo observa reflexionando sobre qué le transmite la imagen y la “pone en cuerpo” para experimentar sensaciones desde dentro. Después “B” realiza la fotografía.

Para profundizar en cómo los mass-media(3) y el consumo musical nos influyen a la hora de “(in)corporar” los estereotipos de género, podemos acudir a la letra de una canción machista y hacer un videoclip.

Cada estrofa de la canción es representada mediante una imagen estática. Damos unos minutos para construir dichas imágenes por subgrupos de 2-3 participantes y después vamos de una imagen a otra narrando la letra de la canción.

 

También se puede hacer con un poema, una noticia, el audio de un programa de televisión, de una serie….esto nos llevará a reflexionar qué mensajes se nos están lanzando y cómo nuestros cuerpos los (in)corporan, acercándonos así a otra de las técnicas de la metodología de Teatro del Oprimido, como es el Teatro Periodístico.

Hacemos un paréntesis para mostrar el Árbol del Teatro del Oprimido de Augusto Boal para ver con qué técnicas estamos trabajando en el paso 1 y 2. Estamos trabajando las raíces, la primera parte del tronco y las primeras ramas. En las raíces aparecen conceptos relacionados íntimamente con la Educación para el Desarrollo y la Educación Popular.

Destacamos algunos aspectos del Teatro del Oprimido (T.O.) a tener en cuenta:

  • Una persona oprimida, no es una persona deprimida
  • Una persona oprimida es una persona que lucha, que desea cambiar/ transformar su situación
  • La opresión puede tener cara de persona, o ser un concepto más abstracto como “los medios de comunicación”.

La opresión siempre ejerce un poder que “frena”a quienes la sufren en el camino de su deseo.

Una de las dinámicas más comunes del Teatro-Imagen es “la máquina”. Consiste en escenificar una opresión (en este caso, relacionada con los estereotipos de género, por ejemplo, algo que me pasó cuando me salí de mi estereotipo). Cada participante se añade a la máquina con un movimiento y un sonido en bucle. Para determinar qué opresión vamos a escenificar podemos hacer “contadas” de situaciones vividas y/o conocidas concretas de nuestro pasado lejano o reciente. Se escoge una historia de entre todas éstas o se crea una nueva historia que tenga elementos de todas las historias, donde esté presente un personaje oprimido y personajes opresores. Se pueden hacer dos o más subgrupos. En las escenificaciones de las máquinas se puede dinamizar las mismas, modificando velocidad (más rápido, más lento) e intensidad (más grande, más pequeño). El público observa reflexionando sobre las sensaciones que le transmite la máquina.

Una buena idea es montar una máquina de los estereotipos de hombre y una máquina de los estereotipos de mujer y ver qué ocurre, que nos transmite.

(2) Metodología impulsada por Augusto Boal a partir de los años sesenta en Brasil, que comprende una serie de técnicas y ejercicios donde se buscan salidas para el sujeto oprimido a través del teatro.

(3) Los mass- media son los medios de comunicación de masas como televisión, cine, radio, prensa. 

Máquina de los estereotipos opresores de la mujer. Chicas del IES Itálica.

Podemos encontrar más juegos, dinámicas y ejercicios en el libro “Juegos para actores y no actores” (Augusto Boal, 2001).


A continuación mostramos un vídeo donde aparecen algunos contenidos aquí descritos y algunas claves a tener en cuenta.